“Establecimiento especializado en encuadernaciones y reparaciones de libros antiguos de manera artesanal. Aunque no tenemos constancia de la fecha de apertura, el propietario asegura que el negocio lo fundó su abuelo en la calle de la Protectora, más tarde, se trasladó al actual taller en la calle Rubén Darío”
Desde 1939. Tercera generación.
En ell año 1939, Salvador Carreras Perelló (abuelo materno del actual propietario) abrió un pequeño taller de encuadernación en la calle de la Protectora con el nombre de Encuadernaciones Carrera. Más adelante, se cambió al local actual que tiene la vivienda en la planta superior.
Su hijo, músico de vocación, trabajaba de saxofonista durante las noches y por las mañanas ayudaba a Salvador hasta que, poco a poco, se hizo con las riendas del negocio. Durante unos años amplió el negocio a encuadernaciones y papelería (al local del lado).
Pero a comienzos de los 90 (con los coleccionables y las adaptaciones del material escolar) aumentó el volumen de trabajo y decidió cerrar la parte de papelería y se quedó solo con la encuadernación, momento en que aprovechó para actualizar el nombre: "Encuadernaciones Reinés".
Pedro (3.ª generación) empezó ayudando en lo más básico (grapas, costuras...) mientras compaginaba los estudios en el instituto nocturno y cuando se jubiló su padre continuó con el negocio familiar.
Reconoce que las nuevas tecnologías han supuesto un cambio, pero por otro lado, a día de hoy, son pocas las encuadernaciones artesanales especializadas en la isla.